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El Punta Lara, una Joya Renovada entre el Océano y los Pinos
Entre pinares, dunas y la brisa del Atlántico, el Hotel Punta Lara se ha consolidado como uno de los destinos más icónicos de la isla de Noirmoutier. Tras una ambiciosa renovación completada en 2024, este refugio costero combina hoy el encanto de antaño con una elegancia moderna que invita a desconectar.
Reimaginado por el interiorista David Comy —nieto del fundador del hotel— en colaboración con la agencia Bureau Gimbert Comy, el nuevo Punta Lara respira luz, naturaleza y autenticidad. Maderas nobles, tejidos naturales y una paleta de blancos, beiges y azules evocan tanto las costas vendéennes como las islas Cícladas. Aquí, todo ha sido pensado para que el tiempo se detenga.
El Punta Lara, una joya renovada entre el océano y los pinos
Una Escapada con Alma Atlántica
El hotel cuenta con 60 habitaciones, 30 de ellas familiares, muchas con vistas abiertas al mar. Desde la piscina exterior hasta los bares con los pies en la arena, pasando por senderos que atraviesan la pinède hasta la playa, el Punta Lara ofrece un equilibrio perfecto entre confort, naturaleza y estilo.
El Punta Lara, una joya renovada entre el océano y los pinos
L’Atlantide: Cocina de Cercanía con Clma Vendéenne
Uno de los corazones de esta transformación es sin duda el restaurante L’Atlantide, donde el chef Stéphane Gourault, al frente desde mayo de 2024, despliega una cocina profundamente arraigada en el territorio. Con formación junto a un Meilleur Ouvrier de France y experiencia en casas de renombre, Gourault propone una carta estacional que celebra lo local.
Lubina en costra de arroz venere, calamar relleno de cordero, tournedó de cerdo de Vendée, raya pochada con risotto de espelta… Cada plato revela la riqueza del entorno. Y para terminar, postres como el tradicional fion vendéen, una pavlova con fresas calientes o el bizcocho nantés.
El Punta Lara, una joya renovada entre el océano y los pinos
La pesca llega cada día desde el cercano puerto de L’Herbaudière, y todos los ingredientes son seleccionados con esmero a través de circuitos cortos, en estrecha colaboración con productores y artesanos de la isla.
El Arte de Vivir Noirmoutrin
Más allá del diseño y de la gastronomía, el Punta Lara defiende un estilo de vida: natural, acogedor y pausado. Bicicletas al atardecer, cócteles en la arena, cenas bajo los pinos… Aquí, el lujo se mide en momentos.
“Queremos seguir escribiendo la historia del Punta Lara, respetando su esencia y proyectándolo hacia el futuro”, afirma su director, Alexandre Leterreur.
El hotel no acaba de abrir. Simplemente ha vuelto a encontrar su lugar entre los destinos más encantadores del Atlántico francés.
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