Restobar 17.45 una alternativa a las tapas!

Si són las 17:45, es hora del apero aquí en Francia y que mejor lugar que el 17:45, qué le da este nombre a una dirección en una de las calles más simpáticas de Bordeaux, la rue Saint James.

Haciendo honor a la hora, es cuando también abre sus puertas de lunes a domingo, cerrando a horas distintas.

© Restobar 17.45

A pocos pasos del Grosse Cloche el primer restobar 100% experto en quesos y embutidos donde el cliente compone el tablero de su elección. Un concepto ideal para el famoso aperitivo francés.

Una gran selección de productos donde podrás crear tu propia plancha. En el sitio, el cliente fabrica su bandeja a medida con más de 50 productos seleccionados con el mayor cuidado. El precio de la porción varía entre 2.5 € y 4 €., Productos fijos y productos que cambian con la temporada.

Una alternativa a las tapas!

© Restobar 17.45

Entre sus productos podemos encontrar: terrinas rillettes, salchichón, chorizo ​​picante, coppa, lonzo corso o incluso jamón ahumado en embutidos. Mientras que los fans  de los quesos puede encontrar entre gouda con trufas, Comté, Camembert de Calvados, los verdaderos quesos de oveja, la mozzarella de búfala a la trufa negra y uno de mis preferidos “Tête de Moine”, a  esta selección infinita se agregan los acompañamientos. Rábanos, pepinos, aceitunas negras, palitos de pan, tomates confitados, mermeladas de higos o incluso chutneys de cebolla … ¡Y una larga carta de opciones!

No olvides disfrutar del Brunch del domingo!

¡Desde las 11h de la mañana hasta las 14h de la tarde todos los domingos!

© Restobar 17.45

Jugo de naranja fresco, café, huevo revuelto, brioche de panadería, queso blanco de lácteos Burdigala y muchos otros productos excelentes.

¿Y si pedimos postres?

Para los amantes del azúcar pueden estar seguros, pueden probar con el tiramisú, el crumble de manzana o incluso tarta de queso con limón. ¡Solo si quieres, pero de salado a dulce, solo hay un paso!

© Restobar 17.45

Alexandre Ducourtieux, capitán de este barco junto a sus marineros nos dicen que si no podíamos seguir añadiendo cosas buenas a este lugar, los camareros y camareras, sonríen, y hablan español, con ese acento francés que tanto nos gusta, sin duda nos hemos sentido bien acogidos y los productos son de un nivelazo, seguro que disfrutas como nosotros.

!Feliz visita y buen provecho!